2014
Las parejas infértiles son mucho más frecuentes hoy en día (15-20%) que hace algunas décadas. Se trata de un problema que se incrementa con los años y que supone una importante causa de frustración. La imposibilidad de tener el hijo deseado es responsable de numerosas crisis de pareja. Sin embargo, no hay que verlo como algo imposible de solventar; por suerte, existen hoy en día numerosos métodos para remediar la infertilidad.
Desde los más suaves recomendados directamente por el ginecólogo, consistentes en la estimulación ovárica o de las relaciones programadas, hasta los que pasan por acudir a una clinica fertilidad especializada y someterse a la inseminación artificial o lafecundación in vitro, los métodos más conocidos.
Saber detectar la causa de la infertilidad puede ser tan importante como saber remediarla. En casos donde la edad es avanzada (por encima de 38 años) esto debe realizarse sin demora. En muchos casos proviene de una fuente hereditaria, y éstos suelen ser los más fáciles de tratar, siempre que se conozca la solución. Un 15-20% de las parejas no tienen causa conocida de esterilidad y precisamente estas con un correcto tratamiento pueden lograr embarazo hasta en un 80% de los casos. En otras causa puede existir solución con estas técnicas pero en general nunca se puede saber de antemano qué paciente puede o no responder al tratamiento o cuántos intentos hacen falta para lograr embarazo.
El nivel de vida es cada vez más vertiginoso y veloz, y el estrés nos acosa incluso aunque no seamos conscientes de ello. Los factores emocionales son determinantes a la hora de lograr el embarazo. Lo mismo sucede con el estado anímico: el encontrarse en una difícil situación sentimental o haber sufrido recientemente un trauma de algún tipo nos afecta decisivamente. En estos casos, lo mejor es dejar pasar la mala época y esperar hasta que esté superada ó acudir a una clínica de reproducción asistida de tu confianza. Muchas veces podemos confundir una situación de este tipo con un problema real de infertilidad.
La edad también influye para la inseminación artificial
Los ciclos biológicos influyen inevitablemente. No es cierto que la barrera para concebir hijos se encuentre en los treinta años; los estudios demuestran que el período más fértil de la mujer se extiende desde los 22 hasta los 35 años. En el hombre, claro está, este tiempo no se contempla, ya que no existe prácticamente ninguna limitación.
La inseminación artificial es una técnica de reproducción asistida de las más sencillas que se realiza cuando no se logra embarazo pero la calidad seminal es buena; pero aunque estos factores sean así por encima de 38 años (la mujer) o con muchos años de esterilidad (más de 5) no se recomienda realizar inseminaciones, y sí realizar directamente una fecundación in vitro.
Si detectamos en la clinica Avantia fertilidad un problema de infertilidad, lo primero es realizar un estudio en el varón y la mujer y si se aprecia un problema debemos intentar corregirlo y si no existe corrección posible debemos decidirnos por tratamientos más complicados como la inseminación artificial ó fecundación in vitro. Con nuestro asesoramiento realizaremos el diagnóstico en el menor tiempo posible (ya que en reproducción asistida no debemos demorar el tratamiento) y realizaremos la pruebas «justas» para el diagnóstico, sin hacer ninguna de más. Aplicaremos el tratamiento pertinente sin excedernos en tratamientos innecesarios que pueden «desgastar a la pareja» en el camino que tienen que superar..