Afrontar un diagnóstico de infertilidad masculina puede ser abrumador, sobre todo cuando se trata de un diagnóstico no muy conocidos, como es la criptozoospermia. 

En Instituto Avantia de Fertilidad sabemos lo importante que es entender bien cada una de las situaciones para tomar decisiones adecuadas contando siempre con el apoyo necesario.

En este artículo de nuestro blog, vamos a tratar de explicarte qué es la criptozoospermia, cuáles son sus causas y qué opciones de tratamiento existen, siempre con el objetivo de ayudarte a encontrar el mejor camino hacia la paternidad.

¿Qué es la criptozoospermia?

La criptozoospermia es una condición donde la cantidad de espermatozoides en el semen es extremadamente baja. A diferencia de la azoospermia, donde no se detectan espermatozoides, en la criptozoospermia los espermatozoides no son visibles en un análisis de semen estándar, pero pueden encontrarse en cantidades mínimas a través de procedimientos más detallados, como la centrifugación de la muestra seminal.

Aunque no es una condición muy común, su impacto en la fertilidad masculina puede ser significativo, ya que la baja concentración de espermatozoides además de disminuir considerablemente las posibilidades de gestación natural,  también dificulta las posibilidades de trabajar con el eyaculado para conseguir espermatozoides con los que fecundar los ovocitos en el proceso de una FIV con microinyección espermática

¿Qué causa la criptozoospermia?

Las causas de la criptozoospermia pueden ser variadas y, en muchos casos, se debe a la combinación de varios factores. Algunas de las causas más comunes incluyen:

• Problemas cromosómicos y genéticos: alteraciones cromosómicas, o mutaciones y pérdidas de material genético en el cromosoma y que pueden interferir en con la producción de espermatozoides.
• Desequilibrios hormonales: con déficit de distintas hormonas que afectan la producción y maduración de los espermatozoides.
• Infecciones: infecciones en el tracto reproductivo que dañan el tejido y obstaculizan la producción espermática.
• Varicocele: una condición que afecta a las venas del plexo testicular dilatándolas y alterando el flujo sanguíneo e incrementando la temperatura testicular, lo que impacta negativamente en la producción de esperma.
• Factores ambientales y hábitos de vida: exposición a toxinas, radiación, consumo de ciertos medicamentos, tabaco y alcohol.

Es fundamental identificar la causa subyacente de la criptozoospermia para determinar el tratamiento más adecuado y mejorar las posibilidades de éxito en un tratamiento de fertilidad.

¿Cómo se diagnostica la criptozoospermia?

El diagnóstico de criptozoospermia comienza con un análisis de semen. Si no se detectan espermatozoides en el examen inicial, la muestra se somete a un proceso de centrifugación, que concentra cualquier espermatozoide presente para su detección. Si tras este procedimiento se encuentran espermatozoides en cantidades muy bajas, se diagnostica criptozoospermia. Cuando ni siquiera tras esta actuación se encuentran espermatozoides, hablamos de azoospermia, siendo necesario confirmar el diagnóstico con al menos dos determinaciones.  

Además del análisis de semen, es posible que tu médico recomiende pruebas hormonales para evaluar los niveles de hormonas que influyen en la fertilidad. En algunos casos, se pueden realizar estudios cromosómicos y genéticos para identificar posibles problemas.

Opciones de tratamiento para la criptozoospermia

El tratamiento de la criptozoospermia depende de su causa subyacente y de las características específicas de cada paciente. Algunas de las opciones incluyen:

1. Terapia hormonal:
   Si la causa de la criptozoospermia es un desequilibrio hormonal, se pueden recetar medicamentos para corregirlo y estimular la producción de espermatozoides.
2. Tratamiento quirúrgico:
   En casos de varicocele u otras anomalías físicas, la cirugía puede ser una opción para mejorar la calidad y cantidad de espermatozoides en el semen.
3. Técnicas de reproducción asistida:
   Si hay presencia de espermatozoides, aunque sea en cantidades mínimas, se puede recurrir a técnicas como la inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI). Este procedimiento consiste en inyectar un solo espermatozoide directamente en el óvulo, aumentando así las probabilidades de fecundación.
4. Criopreservación de esperma:
   Para aquellos hombres que producen espermatozoides en cantidades muy bajas, congelar muestras de semen para futuros tratamientos puede ser una alternativa que preserve la fertilidad antes de que se produzca una azoospermia
5. Modificación del estilo de vida:
   Mejorar la dieta, reducir el consumo de sustancias nocivas y mantener un estilo de vida saludable pueden contribuir a una mejor producción de espermatozoides. Aunque no siempre es la solución definitiva, tener hábitos saludables es un complemento importante en cualquier tratamiento.

La criptozoospermia puede ser un diagnóstico difícil de aceptar, pero no significa que se cierre la puerta a la paternidad. Si tú o tu pareja están enfrentando dificultades para concebir, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. La esperanza y el sueño de formar una familia siguen siendo posibles.