Aunque ya no es probable que sucedan más olas de calor y lo lógico es que las temperaturas se suavicen, todos sabemos que aún nos quedan los últimos días de calor de verano que pueden afectar y fatigar a las embarazadas.

Durante el embarazo la temperatura corporal de la mujer es más elevada debido a los cambios hormonales, eso sumado al aumento de la temperatura hace que tengamos que tener en cuenta algunos consejos para sobrellevarlo mucho mejor.

Aquí te dejamos una lista de cosas que puedes hacer y anotar para futuras ocasiones:

• Hidrátate de forma constante: Bebe entre 2 y 2.5 litros de agua al día. Si te cansas de beber agua puedes tomar helados naturales o agua con limón y hielo.
• Incluye en tu dieta alimentos frescos como frutas y verduras de temporada: Son perfectos porque suelen tener más cantidad de agua.
• Haz cenas ligeras y fresquitas para evitar digestiones lentas y pesadas. Además, así conseguirás descansar mejor.
• Controla el consumo de sal: Esto es fundamental para evitar piernas hinchadas y retención de líquidos. Intenta no consumir demasiados ultraprocesados, caldos ricos en sal, patatas fritas, conservas, embutidos, ahumados y quesos con alto contenido en sal.
• Utiliza ropa de algodón o lino y refréscate con agua fría o tibia, te ayudará a aliviar el calor.
• Activa la circulación de tus piernas y siéntelas más ligeras tomando alimentos como arándanos, uva negra y cebolla.

Pero, sobre todo, no te agobies. Disfruta de lo que queda de verano y si tienes alguna duda, ¡estaremos encantados de atenderte!